La distancia, suspiro de kilómetros y
espacio sin relleno
aumenta el mutismo, el extrañamiento
de los soliloquios de un espejo
sin afeitar
Nada nuevo hasta que una fotografía
que cuenta los días del calendario
habla de los desperfectos de la soledad
No es el silencio
tu paz sólo necesita saberme ahí
mi inquietud hurgar en la tuya
Así que
sorbo el café de la mañana
y escribo
“Tu ausencia, irreparablemente,
es el dolor de sentirme vivo”.
Cesárea Tinarejo
No hay comentarios:
Publicar un comentario